1 calabacín italiano (300 g)
2 zanahorias (240 g)
2 zanahorias (240 g)
4 huevos (200 g)
1 cucharadita de sal refinada (5 g)
½ cucharadita de pimienta negra (2 g)
1 taza de harina de trigo (130 g)
1 taza de pan rallado (130 g)
900 ml de 900 ml de aceite de soja Soya
Crema agria
¼ de taza de queso crema (50 g)
⅔ taza de nata espesa (75 g)
Jugo de ½ limón (20 ml)
1 cucharadita de sal (5 g)
1 cucharada de cebolleta picada fina (7 g)
Cortar el calabacín y la zanahoria en bastones del grosor de un dedo (unos 10 cm x 1 cm). Batir ligeramente los huevos y sazonar con sal y pimienta negra.
Pasar de nuevo los bastones por los huevos, la harina de trigo y la mezcla de huevo. Terminar pasándolos por el pan rallado y presionando suavemente para que el rebozado sea uniforme.
Calentar la sartén en la sartén.
Calentar el aceite de soja a 170 °C y freír los palitos hasta que estén dorados. Colocar sobre una rejilla o papel de cocina para que no pierdan su crujiente. Mezclar todos los ingredientes de la salsa de crema agria hasta que quede homogénea y servir con los palitos.
Salsa de crema agria.